miércoles, 22 de diciembre de 2021

Instituto de Secundaria Cervantes, 90 años de Enseñanza.

INSTITUTO DE SECUNDARIA CERVANTES, 

90 AÑOS DE ENSEÑANZA. 

Fachada del Instituto Cervantes vista desde la Ronda de Toledo.

En la parte alta de la glorieta de Embajadores, junto al caserón que fue la Tabacalera, se alza el gran edificio de ladrillo del Instituto de Enseñanza Secundaria Cervantes. Este inmueble fue construido en 1877 por el gran arquitecto Francisco Jareño, siguiendo un estilo neomudéjar. Se levantó sobre los terrenos que ocupaban anteriormente la ría artificial y el edificio circular de los jardines históricos del Casino de la Reina. Esta finca de recreo fue un regalo del Ayuntamiento a María Isabel de Braganza, segunda esposa del rey Fernando VII. Esta nueva construcción de Jareño fue sede entre 1882 y 1958 de la Escuela de Veterinaria.

Entrada al Casino de la Reina por la Ronda de Toledo con el edificio circular que guardaba las falúas que navegaban por la ría. Fotografía de 1859 de Jean Laurent. Fuente:  https://www.culturaydeporte.gob.es/

El Centro forma parte del selecto grupo de los Institutos históricos de Madrid y es el tercero más antiguo, detrás del San Isidro y del Cardenal Cisneros. Su origen se remonta a 1929, cuando se abre el Instituto femenino Infanta Beatríz en un palacete de tres plantas con jardín en la calle Zurbano 14. En 1931 un Decreto del Ministerio de Instrucción Pública transforma el Centro existente y crea el Instituto Nacional de Segunda Enseñanza Cervantes, con alumnado mixto.

Decreto del Ministerio de Instrucción Pública que crea el Instituto Cervantes  el 28 de agosto de 1931, expuesto en el Centro.  

En 1934 el Instituto se trasladó a un palacete de tres plantas con jardín situado en el número 3 de la calle Prim. Tras la guerra civil fue cambiado a Instituto masculino y permaneció en esta sede hasta 1950. Ese año se muda a la calle Fortuny nº 15, ocupando el caserón que había sido antes Colegio Alemán de Madrid. Cuando en 1958 la Facultad de Veterinaria de la glorieta de Embajadores se traslada a la Ciudad Universitaria, el edificio queda vacío. El Ministerio de Educación realiza unas obras para convertirlo en la sede definitiva del Instituto Nacional de Bachillerato Cervantes, inaugurado en 1960 exclusivamente para alumnado masculino.

Antigua Escuela de Veterinaria a comienzos del siglo XX. Fuente: https://veterinaria.ucm.es/historia


Fachada del Instituto Cervantes en la calle Embajadores.

Con el “baby boom” de los años sesenta, el Centro se queda pequeño y es ampliado en 1966 con un edificio anexo con entrada por la calle Embajadores, donde hoy se ubica la Escuela Oficial de Idiomas. En el curso 1981-82 el Instituto volvió a ser mixto, como antes de la guerra civil. El edificio histórico de Jareño sufrió una profunda remodelación en el año 1991, en la que se restauran elementos arquitectónicos originales y se adapta a las nuevas necesidades educativas. En esa época también se renovaron las instalaciones deportivas del patio.

Animado patio del Instituto. Al fondo a la izquierda vemos el edificio blanco con el que se amplió en 1966 el Centro educativo.

Templete del patio central reconstruido en 1991. En la etapa de la Escuela de Veterinaria era una forja y herradero.

A lo largo de sus nueve décadas de historia han pasado por sus aulas prestigiosos profesores como el poeta Antonio Machado, que impartió clases de francés, la pensadora María Zambrano profesora de Filosofía, o los pintores Daniel Vázquez Díaz y Rafael Penagos profesores de Dibujo. 

Facsímil del nombramiento de Antonio Machado como Catedrático de Francés (1936). Se encuentra expuesto en el Centro.

En el Centro han estudiado personalidades como los políticos Leopoldo Calvo-Sotelo y Enrique Tierno, el filósofo Emilio Lledó y destacados miembros de la vida cultural  española como el humorista Forges, el director José Luis Garci, el periodista Joaquín Arozamena, o la actriz Ana Mariscal.


Viñetas sobre El Quijote del humorista Antonio Fraguas "Forges", antiguo alumno del Instituto. Un conjunto de ellas decoran las paredes del Salón de Actos.

Antonio Machado fue Catedrático de Francés entre 1935 y 1939, exiliándose al final de la guerra civil a Colliure (Francia), dónde murió en 1939. Tras la contienda, y a pesar de haber fallecido, se le abrió un expediente de Depuración y separación del Cuerpo de Catedráticos por motivos ideológicos. Al cumplirse en 1981 el Cincuentenario del Instituto, el Claustro de Profesores quiso rendir un homenaje al escritor, proponiendo al entonces Ministerio de Educación su rehabilitación como Catedrático. Aprobada la propuesta por el entonces ministro Federico Mayor Zaragoza, se publicó en el BOE su rehabilitación a título póstumo y se colocó en la escalera principal una lápida en su honor.

Lápida en memoria del catedrático de Francés y poeta Antonio Machado, instalada en 1981 en la escalera principal.

Gran mural que representa a Miguel de Cervantes en la escalera principal, obra de Taquera (2016).

El edificio histórico tiene forma rectangular, con un gran patio central ajardinado. Cuenta con dos cuerpos poligonales en la parte norte y sur, que corresponden al salón de actos y aula magna en la planta baja, y a laboratorios de Ciencias Naturales y de Física y Química en la planta alta. El cuerpo poligonal del lado oeste albergó entre 1961 y 1991 la Capilla. Hoy día es una espaciosa Biblioteca que cuenta con dos pisos. Amplios ventanales dotan de una gran luminosidad a todas la aulas.  

Viejas vitrinas que conservan objetos históricos en el laboratorio de Ciencias Naturales.

Las estantería de la Biblioteca están distribuidas en dos pisos.

En el despacho de la Dirección se conserva mobiliario del siglo XIX que perteneció a José de Salamanca y Mayol, marqués de Salamanca. Procede del palacio de la Quinta de Vista Alegre (Carabanchel), residencia de su propiedad donde vivió hasta su fallecimiento en 1883.


Rincones del Despacho de Dirección, con mobiliario del siglo XIX.

Una vitrina situada junto al arranque de la escalera principal expone importantes documentos históricos del Centro, como el Decreto de creación por el Ministerio de Instrucción Pública (1931), los nombramiento de los profesores María Zambrano (1935) y Manuel Machado (1936), primeras ediciones de la obra poética de Pedro Salinas, el tomo de la Historia General de España del Padre Mariana (1783), el número 1 de la Revista Cervantes (1960), además de libros y trabajos escolares, instrumental científico y pedagógico, etc.

Vitrina que expone los documentos históricos y antiguos objetos de uso pedagógico en el Centro. 

En el vestíbulo abovedado del Instituto se colocó hace pocos años el busto de escayola del arquitecto Francisco Jareño Alarcón (1818 - 1892). Es una copia del original que se conserva en el Museo de Albacete, donado por la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando.  En una vitrina de madera se conserva un barco acorazado alemán, procedente de la anterior sede de la calle Fortuny que perteneció al Colegio Alemán.

Busto de escayola del arquitecto constructor del edificio Francisco Jareño.

Maqueta de un torpedero alemán expuesta en el vestíbulo del edificio.

Como curiosidad, comentar que toda la verja de forja artística que rodea el Centro procede de los antiguos Jardines del Buen Retiro. Estaban situados en la zona comprendida entre las calles Alcalá, Alfonso XI, Juan de Mena y Paseo del Prado. Este área vallada era alquilada al Ayuntamiento por un empresario, que la explotaba con un teatro para representaciones y bailes, paseos ajardinados, zonas recreativas y restaurantes.  Despareció a partir de 1905, cuando el terreno fue recalificado para construir en este lugar el Palacio de Correos y Comunicaciones (actual Ayuntamiento), y el Cuartel General de la Armada.

Grabado de 1853 que muestra la verja de los Jardines del Buen Retiro próxima a la plaza de la Independencia. Fuente: Museo del Romanticismo.

Detalle de la verja artística que rodea el Instituto por la glorieta de Embajadores. 

Tramos de la antigua verja de los Jardines del Buen Retiro que hoy día cierran el  Parque del Retiro por la calle Menéndez Pelayo, entre la Biblioteca Eugenio Trías y la Puerta de Herrero Palacios.


El Instituto custodió durante muchos años la Biblioteca personal que legó el poeta Pedro Salinas al exiliarse en 1936 a EEUU. Para garantizar una correcta conservación y catalogación de los valiosos fondos, el Cervantes donó en 2017 un conjunto de 1432 obras a la Biblioteca Regional de la Comunidad de Madrid Joaquín Leguina.

Entrada principal al Instituto en el número 70 de la calle Embajadores.

En 2010 fue uno de los primeros Institutos que se acogió al programa bilingüe en inglés de la Comunidad de Madrid. Proyectado a la enseñanza del futuro, desde el año 2020 ofrece los estudios del Bachillerato Internacional de dos años de duración. Su primera promoción saldrá en 2022. El Instituto tiene como lema “Post tenebras spero lucem” (Tras las tinieblas espero la luz). Esta leyenda aparece en el sello de Juan de la Cuesta, impresor de la primera edición del Quijote en 1605.

Aula Magna dispuesta en forma de anfiteatro.

Laboratorio de Química, con la cubierta de madera restaurada durante las obras de 1991.

Casi cuarenta años después de mi llegada al Instituto Cervantes, he vuelto al viejo caserón  de la glorieta de Embajadores. Allí estudié durante tres años el antiguo BUP (Bachillerato Unificado Polivalente) y un año del COU (Curso de Orientación Universitaria).

Mi mayor agradecimiento a la directora Encarna Mainez por su excelente acogida, por contarme las historias del Centro y mostrarme amablemente todos sus rincones.

Cuerpo poligonal del edificio visto desde la entrada al aparcamiento en la glorieta de Embajadores. 
 

Copyright © José Luis Rodríguez-Checa 2021.

Prohibida la reproducción total o parcial del artículo y las fotografías, salvo autorización escrita del autor.

 

viernes, 3 de diciembre de 2021

El Casino Gran Vía, de los "Felices años 20" al siglo XXI.

 EL CASINO GRAN VÍA, DE LOS "FELICES AÑOS VEINTE" AL SIGLO XXI.


Antiguo edificio del Círculo de la Unión Mercantil e Industrial, actual Casino Gran Vía. 

La inauguración oficial de las obras de construcción de la Gran Vía de Madrid tuvo lugar el 4 de abril de 1910, con un simbólico golpe de piqueta que hizo el rey Alfonso XIII. Estaba acompañado ese día de la reina Victoria Eugenia, miembros de la Familia Real, el presidente del Consejo de Ministros José Canalejas, el alcalde José Francos Rodríguez, el Cuerpo diplomático y otras autoridades civiles y religiosas.

Fachada del Círculo de la Unión Mercantíl e Industrial en los años 20. Fuente: https://www.casinogranvia.es/

Con ello arrancaban unas polémicas obras, cuyo proyecto se había gestado desde el último tercio del s. XIX. De hecho la famosísima zarzuela “La Gran Vía”, inspirada en esta gran transformación urbana, fue estrenada en 1886 por el músico Federico Chueca.  La innovadora reforma no había prosperado hasta entonces por motivos burocráticos, económicos y razones de índole social, debido a que su construcción implicaba la demolición de unas trescientas viviendas y la desaparición de quince calles.

Avenida de José Antonio entre 1939 y 1945. Fuente:  http://www.memoriademadrid.es/

El primer tramo, que nace en la calle Alcalá y termina en la Red de San Luis, se abrió a la circulación de vehículos en 1917, quedando todavía solares por edificar. Fue bautizado con el nombre de avenida del Conde de Peñalver, alcalde durante la Restauración y comienzos del siglo XX y gran impulsor de la obra. La nueva avenida de 1.306 metros de longitud iba a servir para comunicar los barrios del este y del oeste de la ciudad. A lo largo de este tramo encontramos edificios construidos en estilos como el regionalista, neoplateresco y afrancesado, de moda en aquel momento.

Fachada del edificio de estilo neorrenacentista.
Hall de entrada al Círculo en 1924.  Fuente:  http://www.memoriademadrid.es/

Curiosamente en este tramo se edificaron prestigiosos centros de reunión y ocio para las clases sociales imperantes como la Gran Peña (Gran Vía, 2) frecuentado por la realeza y la aristocracia y el Casino Militar (Gran Vía, 13 ) lugar de reunión del estamento militar. En el número 24 de la avenida se abrió en 1924 el Círculo de la Unión Mercantíl e Industrial, punto de encuentro de la burguesía y los empresarios de la época.

Patio central del Círculo de la Unión Mercantil e Industrial en 1924. Fuente:  http://www.memoriademadrid.es/

Entrada principal al Casino en Gran Vía 24.

Esta entidad fundada en 1858 encargó la edificación de este elegante edificio a los arquitectos Joaquín y Luis Sainz de los Terreros.  La fachada de piedra es de estilo neorrenacentista, en la que destaca la gran rotonda de la esquina con la calle Hortaleza, rematada con una cúpula de pizarra, las ventanas adornadas con frontones y la serie de arquillos platerescos de la quinta planta, copiados del salmantino palacio de Monterrey.

La Gran Vía en 1973. Fotografía de Alwin Noller. Fuente: Página de Facebook: "Madrid Historia en imágenes".

Arranque de la escalera imperial desde la planta baja.

Dentro de sus instalaciones, el Círculo contaba con un gimnasio y sala de esgrima en el sótano. En el entresuelo estaban las salas de lectura, de tertulia y el comedor. En la planta principal se dispuso el Salón Real, junto a despachos y oficinas. Por último la terraza disponía de un comedor al aire libre, utilizado en época estival.  Además el edifico albergaba viviendas de alquiler, con acceso independiente por la calle Hortaleza, y locales comerciales en los bajos.

Salón Real, ocupado actualmente por mesas de juego.

Rincón del Salón Real.

A comienzos del siglo XXI, el edificio fue sede durante unos años del Área de Gobierno de Economía, Empleo y Participación Ciudadana del Ayuntamiento de Madrid. Goza hoy día de la máxima protección patrimonial, destacando su suntuoso portal de acceso con columnas, la escalera imperial de mármol por la que se accede a las tres primeras plantas y el patio central porticado de estilo renacentista, cubierto con una bóveda de cristales de colores de la prestigiosa Casa Maumejean.

Detalle de las columnas y la balaustrada de la tercera planta.

Bóveda de cristales realizada por la Casa Maumejean que cubre el patio central.

El 5 de abril de 2010 el Salón Real acogió la recepción ofrecida por el Ayuntamiento, presidido entonces por Alberto Ruíz Gallardón, con motivo de la celebración del Centenario de la Gran Vía. En ella participaron los entonces Reyes de España y otras autoridades. Este espléndido salón de baile decorado al gusto de los años veinte conserva la decoración original, con soberbias lámparas de araña, molduras de escayola, papeles pintados, frescos y tapices.  

Detalle de la decoración de molduras del techo y las lámparas del Salón Real.  

Salón del Restaurante Círculo Merantil.

El Casino Gran Vía abrió sus puertas en diciembre de 2013, como sede filial del Gran Casino de Aranjuez enclavada en el corazón de Madrid. Este centro, creado como un moderno complejo de ocio, pretende fomentar la cultura del juego responsable, tal y como está desarrollada en otros países con mayor tradición. 

Sala de juego.

Además de los tradicionales máquinas de azar, en sus diversas plantas se puede jugar al bingo electrónico, la ruleta americana, el black jack, punto y banca, etc. En los últimos años el  Casino ha vivido también el gran auge del póker a nivel internacional y suele celebrar periódicamente torneos de este juego.

Detalle de la mesa de ruleta en el Salón Real.

Dispone además de un notable restaurante, una Vinoteca y un Cocktail Bar abiertos al público. En sus magníficos salones se pueden celebrar también actividades gastronómicas y eventos de empresa. Parte del edificio está ocupado desde 2017 por el selecto Hotel Círculo Gran Vía, perteneciente a una lujosa cadena y de acceso exclusivo para adultos.

Salón del Restaurante en la rotonda del edificio.

Rincón del Cocktail Bar 

Como reflejo de su historia casi centenaria y su íntima relación con la Gran Vía, en varias de las paredes del Casino se expone una colección de 175 fotografías históricas. Conocida con el nombre de “Memorias de la Gran Vía”, las imágenes proceden de los archivos del Diario ABC y de la Agencia EFE.

Detalle de la exposición fotográfica permanente "Memorias de la Gran Vía" en la tercera planta.

Mi agradecimiento a Alexandra Pomian, Directora de márketing y comercial del Casino Gran Vía por su excelente acogida, mostrando las instalaciones y facilitando la realización de las fotografías. Imágenes cedidas por cortesía de Elena Martínez.

Red de San Luis y fuente de las aves, 1962. Tarjeta postal colección Escudo de Oro. Fuente:  http://www.memoriademadrid.es/

  

Copyright © José Luis Rodríguez-Checa 2021.

Prohibida la reproducción total o parcial del artículo y las fotografías, salvo autorización escrita del autor.

 

El Hotel Palace, historia viva de Madrid desde 1912.

EL HOTEL PALACE, HISTORIA VIVA DE MADRID DESDE 1912. Entrada principal al hotel, en el chaflán de la calle Duque de Medinaceli con la plaza ...